7:45 y comienza la lucha por despertarle. Le dejo dormir un poco más mientras le preparo un buen desayuno y durante el tiempo en el que transcurre esta rutina repito la misma frase: “qué pena”… porque imagino lo calentito que está abrazado a sus sábanas dos segundos antes de oírme entrar por la puerta… Los lunes son horribles, es una vuelta a empezar con mil protestas y un “no quiero ir al cole” que se repite a cada segundo… nos montamos en el coche, enciendo la calefacción…
No más de 15 minutos, esto es lo que tarda Jose en llegar al colegio…
“Un día, mientras yo estaba en el Lago Salado de Magadi, (Kenia), por necesidades de una película, vi a cinco jóvenes que llevaban una bolsa extraña en el cinturón. Cuando les pregunté qué era, uno de ellos se adelantó y con mucho orgullo sacó una flamante pluma, pizarra y una tiza. Jadeante, me dijo que estaba de camino a la escuela. Hacía dos horas que había dejado el pueblo y corría hacia la escuela bajo el sofocante calor”. Esto es lo que hizo que un documental como Camino a la escuelaterminara en los cines mostrando la realidad de muchos niños que cada día se levantan con la ilusión de aprender para poder tener, con suerte y mucho esfuerzo, un futuro mejor.
A través de la historia de Jackson, Carlitos, Zahira y Samuel descubriremos como la ilusión y el coraje por conseguir los sueños hace que estos niños luchen cada día para no perderse ninguna clase. Tienen planes, unos padres que les apoyan en la consecución de los mismos… la finalidad no es diferente a la de nuestros pequeños, a la de los alumnos con los que me rodeo cada día… el fondo podría ser muy parecido pero su historia se contará, sin duda, con una voz desgarrada por la emoción de una realidad difícil de imaginar.
No sólo recomiendo ver esta película, especialmente animo a hacerlo en familia para después debatir y reflexionar sobre cómo vivimos, a veces, ajenos a las realidades exteriores. Trabajamos la empatía a diario, en lo rutinario que nos va surgiendo en cada sesión, con cada actividad… pero en muchas ocasiones es importante abrir las ventanas y ver más allá del cristal donde las oportunidades se miden con las palmas de las manos, donde la suerte no sólo es cuestión del azar…
va, el mundo entero se aparta
para dejarle paso»
Bertrand Russel